Cundinamarca Brilla.

 

Mango criollo enfrenta su mayor amenaza con apoyo de la ciencia

El mango de azúcar enfrenta una amenaza que se aliviaría entendiendo su genética.
Foto: archivo Unimedios.
agenciadenoticias.unal.- Según el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) en 2023 Colombia exportó por primera vez 13 toneladas de mango de azúcar hacia Estados Unidos por vía marítima. El cargamento partió de Santa Marta rumbo al puerto de Savannah (Georgia) y representó un logro histórico para los productores del Magdalena.

Sin embargo, la amenaza no da tregua. El hongo Colletotrichum se desarrolla con alta humedad y temperaturas entre 20 y 30 °C provocando la enfermedad conocida como antracnosis, que genera manchas negras en hojas y frutos, reduce su calidad comercial y puede destruir por completo las plantas.

Las estrategias actuales se limitan a químicos que retrasan los síntomas, pero el patógeno es capaz de vivir dentro de la planta sin causar daño aparente, lo que complica su control. Andrés Felipe Quintero Mercado, doctor en Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), explica que “este hongo puede permanecer en estado de reposo dentro del fruto y activarse cuando las condiciones le favorecen, lo que representa un reto enorme para los agricultores”.

Consciente del impacto, el investigador decidió analizar los genes del mango afectados durante la infección, un campo con pocos estudios en variedades nativas. Para ello empleó técnicas de transcriptómica, rama que examina cómo se expresan los genes frente a enfermedades, en mangos cultivados en la Granja Experimental de la Universidad del Magdalena.

Los mangos se inoculaban con el hongo para analizar la evolución
de la infección y su respuesta genética.
Foto: Andrés Felipe Quintero Mercado, doctor en Ciencias Agrarias de la UNAL.
Una carrera contra el tiempo

Como quien busca desactivar una bomba antes de que estalle dentro del fruto, el investigador siguió la evolución del ARN en las células del mango, en un proceso costoso que requirió laboratorios especializados en el exterior. Inoculó con el hongo más de 20 frutos aparentemente sanos y observó cómo cambiaba su genética con el paso de las horas.

A las 12 horas ya se expresaban más de 5.000 genes; luego, tras un proceso de depuración bioinformática, se identificaron 379 genes relacionados con la infección y 42 que se reprimían o apagaban, debilitando las defensas del fruto. En apenas 24 horas el patógeno comenzaba a destruir los tejidos de la piel dejando las típicas manchas negras.

Para el estudio los mangos se recolectaron en una granja de
Magdalena, la principal región productora de este mango.
Foto Andrés Felipe Quintero Mercado, doctor en Ciencias Agrarias de la UNAL.
El gen MT3 (metalotioneína 3) fue el más afectado; su función es proteger las células del daño oxidativo, actuando como antioxidante natural.
 Al perder esa capacidad, las células se deterioran, fenómeno similar al que ocurre en humanos ante el estrés oxidativo por tabaquismo o mala alimentación.
  “El mango también tiene sus propios mecanismos de defensa, pero el hongo logra desactivarlos desde adentro”, señala el doctor Quintero.


El comportamiento del hongo es endófito, pues habita el tejido vegetal sin causar daño, y luego se convierte en necrófito, matando los tejidos cuando el fruto madura.
Este doble comportamiento explica por qué la enfermedad es tan persistente.

Mango con manchas por antracnosis.
Foto: Andrés Felipe Quintero Mercado, doctor en Ciencias Agrarias de la UNAL.
Además, el estudio se centró en la variedad criolla, lo que lo convierte en un trabajo pionero en la región. “A futuro se podrían reforzar los genes que actúan como guardianes naturales del fruto, haciendo que el mango sea más resistente sin depender de agroquímicos”, afirma.

Aunque el hongo no representa riesgo para el consumidor, sí afecta la apariencia y calidad del fruto, aspectos determinantes para la exportación. El experto confía en que sus resultados inspiren programas de mejoramiento genético y apoyo estatal para proteger el mango, una fruta que, gracias a la ciencia, aún tiene salvación.

Andrés Felipe Quintero Mercado, doctor en Ciencias Agrarias de la UNAL.

Monitoreo hídrico: 29 pozos para proteger el agua

La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), en su ejercicio de autoridad ambiental y con el propósito de garantizar la seguridad hídrica del territorio, ha venido adelantando en los últimos años la instalación de un número significativo de pozos piezométricos que permiten el seguimiento y monitoreo del recurso hídrico subterráneo.

“Actualmente, la CAR cuenta con 15 pozos piezométricos instalados en puntos estratégicos de la cuenca del río Bogotá. Como parte de la nueva fase del proyecto, la Corporación proyecta para el año 2026 ampliar esta red a 29 piezómetros, logrando así fortalecer el Plan de Manejo Ambiental de Acuíferos y avanzar hacia un uso responsable y sostenible del recurso.” aseguró el director de la CAR, Alfred Ignacio Ballesteros.

En este proceso, se contempla la construcción de 14 pozos adicionales en la cuenca Alta del río Bogotá, con una inversión estimada de $31 mil millones, en municipios como Gachancipá, La Calera, Nemocón, Sesquilé, Sopó, Suesca y Tocancipá. Esta expansión permitirá consolidar un sistema robusto para conocer en detalle el comportamiento de las aguas subterráneas en esta región del territorio.

La red piezométrica permitirá:

* Medir en tiempo real el comportamiento del agua subterránea.

* Identificar riesgos de contaminación.

* Conocer la recarga de los acuíferos.

* Prevenir la sobreexplotación del recurso hídrico.

El proyecto incorpora además tecnología satelital para la transmisión de datos en tiempo real, y estudios geofísicos, que facilitan la ubicación precisa de los pozos en los sitios óptimos para su operación.

Con estos avances, la CAR fortalece la seguridad hídrica de las comunidades, protege la integridad de los acuíferos y aporta información técnica clave para la planificación urbana y la adaptación al cambio climático. Esta información es fundamental para evitar problemáticas como la escasez de agua y la pérdida de calidad del recurso hídrico.

Cabe recordar que en Cundinamarca existen más de 3.000 pozos de agua subterránea, y que la CAR ha otorgado más de 2.000 concesiones para el abastecimiento de empresas, el sector ganadero y otras actividades productivas que dependen de este recurso esencial.

CUNDINAMARCA BRILLA.

Refuerzan acciones contra quemas a cielo abierto en Soacha por temporada de fin de año

Un nuevo operativo de alto impacto realizó en las últimas horas la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca – CAR y la Fuerza Pública, para poner freno a las quemas a cielo abierto para la producción de carbón vegetal en zona rural de Soacha, que suelen incrementarse en la temporada de fin de año.

Integrantes de la Unidad Integrada de Gobernabilidad Ambiental – UIGA de la CAR, con el apoyo del Batallón de Infantería No. 39 Sumapaz del Ejército Nacional, la Fuerza Aeroespacial Colombiana y el Grupo de Carabineros y Protección Ambiental de la Policía Nacional llegaron a la vereda La Chacua, del municipio de Soacha, una de las zonas donde el delito de quemas a cielo abierto para la producción de carbón vegetal es recurrente.

Allí, fueron sorprendidos en situación de flagrancia dos operarios realizando quemas a cielo abierto de retal de madera, representadas en doce pilas en combustión incompleta de madera con pintura, puntillas y otros elementos como plásticos, lonas y empaques, en un volumen estimado de 150 metros cúbicos y ocho pilas más en proceso de armado, con un volumen aproximado de 109 metros cúbicos.

La actividad de quema a cielo abierto de retal de madera para la producción y obtención de carbón vegetal eliminó la cobertura vegetal en aproximadamente 0,54 ha como consecuencia de la combustión directa y la emisión de material particulado

La materia prima utilizada estaba compuesta principalmente por retal de estibas, retazos de huacal de madera, madera en tabla, carretes de cable, trozas de madera de especies como acacia amarilla y eucalipto.

De acuerdo con los análisis realizados por los biólogos que conforman la UIGA, la presencia de carbón vegetal y de residuos sólidos dispuestos de forma inadecuada generan un cambio físico del entorno y, por ende, modifican directamente el hábitat de aves y animales terrestres, fosoriales y edáficos, al generar un cambio de los microhábitats disponibles para la fauna, como se pudo documentar tras observar una mirla (Turdus fuscater) perchada en un árbol quemado.

Durante la visita se evidenció además la generación de residuos peligrosos (RESPEL), representada en tres canecas metálicas de 55 galones con residuos de aceite, y envases de pintura las cuales se utilizan para recolectar y almacenar agua.

La gestión inadecuada del aceite usado y/o materiales contaminados con estas grasas que son utilizadas para agilizar el proceso de combustión afecta los recursos hídricos y el suelo.

La afectación al suelo no solamente es perjudicial para la salud humana, sino para todas las demás formas de vida, ya que la presencia de este residuo peligroso altera los procesos de intercambio con el medio ambiente.

"No nos cansaremos de reiterar la gravedad que representan las quemas a cielo abierto para el ambiente y para la salud de las personas, pues además de todas las sustancias tóxicas que se dispersan durante el proceso de combustión y que degradan la calidad del aire y del entorno": afirmó el director general de la CAR, Alfred Ignacio Ballesteros.

El funcionario explicó que el carbón que allí se produce y comercializa es distribuido en asaderos, restaurantes, y almacenes que lo adquieren y utilizan sin tener en cuenta que es el resultado de una quema indiscriminada, no selectiva y desde luego irresponsable de desechos que se recogen en calles y avenidas de Bogotá y municipios cercanos.

La Corporación ordenó la suspensión inmediata de la actividad mientras se avanza en el análisis técnico de las afectaciones, al tiempo que la Policía llevó a cabo la captura de las dos personas que operaban en el predio y que fueron puestas a disposición de la Fiscalía de Soacha.

Asbesto en Cundinamarca graves riesgos ambientales y sanitarios persisten.

La Contraloría de Cundinamarca dio a conocer un avance del capítulo dedicado al asbesto dentro del Informe Anual del Estado de los Recursos Naturales y del Ambiente – Vigencia 2024, que será publicado a finales del mes diciembre. Este apartado revela la persistencia de estructuras, tanques y elementos fabricados con asbesto en distintas provincias del departamento, pese a la prohibición nacional establecida por la Ley 1968 de 2019.

Los datos analizados evidencian una distribución desigual de los pasivos ambientales asociados al asbesto, situación que representa riesgos sanitarios, ambientales y sociales de largo plazo.

Principales datos identificados en Cundinamarca

El análisis muestra alertas relevantes: La provincia del Guavio concentra la mayor superficie identificada en el análisis, con 690.560,75 m², una cifra muy superior al resto del departamento.
Sumapaz es la provincia con mayor número de canales registrados, superando las 2.700 estructuras. Le siguen Ubaté, Gualivá y Almeidas, todas con más de 2.000 canales.
Alto Magdalena y Soacha no registran canales, lo que podría explicarse por ausencia de reportes o menor representatividad hídrica en la zona.

Las provincias de Ubaté, Rionegro, Tequendama y Bajo Magdalena concentran el mayor número de tanques elaborados con asbesto, lo que implica una exposición histórica mayor y una vulnerabilidad sanitaria significativa.

Estas cifras permiten comprender la magnitud del desafío: aún existen infraestructuras antiguas —especialmente en zonas rurales— que contienen elementos fabricados con asbesto y que requieren una intervención prioritaria para proteger la salud pública.

Porqué preocupa el asbesto

El asbesto fue prohibido en Colombia mediante la Ley 1968 de 2019 y reglamentado por el Decreto 402 de 2021, debido a su comprobado impacto en la salud. Este material, usado durante décadas en cubiertas, tuberías, tanques y estructuras de fibrocemento, libera fibras microscópicas que pueden permanecer en el ambiente durante años.

La exposición prolongada está asociada con enfermedades graves como:
- asbestosis
- cáncer de pulmón
- mesotelioma

Estas patologías pueden aparecer incluso décadas después del contacto inicial. Uno de los casos más emblemáticos del país es Sibaté, en donde la exposición ambiental generó afectaciones profundas en la salud de varias familias, especialmente a la periodista Ana Cecilia Niño, quien pasó su infancia en un barrio que estaba rellenado con escombros que botaba una fábrica cercana.

En términos ambientales, las fibras de asbesto también alteran la calidad del aire, contaminan el suelo y pueden infiltrarse en fuentes de agua, afectando ecosistemas completos.

Qué mostró el análisis

Pese a los avances normativos, la transición hacia la eliminación total del asbesto avanza con rezagos en el territorio. Varias provincias mantienen estructuras antiguas, falta información actualizada y deben fortalecerse los planes de manejo, remediación y sustitución de materiales. Para lograrlo la Contraloría de Cundinamarca insiste:

- Mejorar la capacidad institucional para identificar y gestionar pasivos ambientales
- Fortalecer la articulación entre sectores de salud, ambiente, trabajo y planeación
- Garantizar financiamiento para sustituir tanques, cubiertas y tuberías con asbesto
- Promover educación ambiental y campañas de sensibilización para las comunidades

Como ente de control, la Contraloría continuará incorporando un enfoque de riesgo sanitario y ambiental en sus auditorías, verificando la correcta destinación de recursos para la sustitución de materiales peligrosos y la protección de las comunidades expuestas.

CUNDINAMARCA BRILLA.

Buscar en CUNDINAMARCA - RED METROnet.

Importante.

Cinco tipos de papa criolla usan mejor el nitrógeno del suelo

Algunos tipos de papa criolla aprovechan mejor el nitrógeno para crecer sanas y fuertes. Foto: Aura Natalia Jiménez Medrano, magíster en Cie...

Resultados del Cundinamarca FEST...

CINVCON S.A.S.

CINVCON S.A.S.