La POLICÍA NACIONAL incauta más de 7.000 botellas de whisky adulterado y 500 kilos de pólvora listos para ser comercializados en esta temporada de fin de año.
El whisky incautado contiene partículas extrañas debido a las precarias condiciones de aseo con las que manipulaban el licor.
Trabajo colectivo entre la Policía Nacional y la comunidad, permitió que la SIJIN Cundinamarca lograra identificar una vivienda, ubicada en el municipio de Mosquera.
Como resultado del operativo se incautaron alrededor de 5.000 botellas de Whisky de diferentes marcas y 2.000 listas para ser comercializadas en los principales centros de comercio de la capital, en este lugar fueron halladas 11.000 botellas recicladas de diferentes bebidas embriagantes, 10.000 sellos de seguridad falsificados con emblemas de la industria de licores de diferentes departamentos, 6.500 cajas falsificadas, 20.000 piezas entre (tapas y válvulas de goteo) materia prima que sería utilizada para producir, envasar y distribuir más de 15.000 botellas que pretendían vender al público para esta temporada de fin de año. El whisky incautado contiene partículas extrañas debido a las precarias condiciones de aseo con las que manipulaban el licor.
Trabajo colectivo entre la Policía Nacional y la comunidad, permitió que la SIJIN Cundinamarca lograra identificar una vivienda, ubicada en el municipio de Mosquera.
El licor adulterado era envasado de manera rudimentaria en botellas recicladas las cuales dotaban de etiquetas y sellos de seguridad falsos con un procedimiento de empaque termo fundido para posteriormente comercializarlo de manera ilegal en Bogotá y algunos municipios de la sabana norte haciéndolo pasar por Whisky importado.
Es de anotar que los falsificadores logran imitar el color del Whisky original mediante la adición de ciertos compuestos químicos de bajo costo que son perjudiciales para el consumo humano, como el alcohol industrial y colorantes minerales. Otro agravante es la deplorable condicione de higiene con la que manipulaban el licor, sumado a que extraían las botellas de la basura para su reutilización.
Los 500 kilos de pólvora fueron
incautados en diferentes dispositivos de control adelantados en los municipios que comprenden Departamento de policía Cundinamarca ya que la gran
mayoría de estos juegos pirotécnicos eran manipulados por niños sin la
supervisión de sus padres.