Con esta radiografía presentada ante los nuevos funcionarios generamos una alerta para que no se repitan estos actos. “No es una situación general, pero este primer ejercicio revela que con el resultado de las auditorías a la vigencia 2015 se reportan hallazgos fiscales de $6.318.876.646, mientras que a la vigencia 2014, registraron $574.529.624, lo que equivale a un aumento del 1.100%.
Entre las prácticas más reiterativas que dio a conocer el jefe del ente de control se destacan:
1. Deficiencia en la inversión de infraestructura y dotación de equipos especializados.
2. Recursos comprometidos en obras inconclusas de hospitales, puestos y centros de salud.
3. Violación de los principios de contratación a través de cooperativas, fundaciones y temporales, ejemplo: se cobra al hospital un valor superior a los salarios que efectivamente se reconocen al trabajador.
4. Falta de verificación en la idoneidad, perfil y experiencia de las personas que prestan el servicio de salud, ejemplo, “tres falsos médicos” que atendieron 1.600 pacientes y expidieron 11 certificados de defunción.
5. La utilización indebida de los recursos de la salud, que a nivel directivo por el servicio del celular se pagaron llamadas a líneas calientes. Igualmente se constató el uso de chip de taqueo de gasolina, en diferentes carros particulares el mismo día, a la par del vehículo oficial.